AdriMar y sus letras

  Gracias Dios   Quien a Dios tiene, nada le falta. Sólo Dios basta . Santa Teresa de Jesús   Gracias Dios, por ser mi mejor motivo de vivir, el motor que impulsa mis mañanas, y quien cierra mis ojos al dormir, gracias por entrar en mi vida desde el inicio de mis días, sin duda eres el ser que esculpe mi existir, Gracias Dios, por permitirme sentir el calor del sol y el frio de las más rotundas tristezas, Gracias Dios por darme lo que ahora tengo y alejarme de aquello que no es relevante en mi vida. Pues eres tu quien me basta, Gracias Dios por escucharme de manera silenciosa cuando tengo temor de hablar y por calmar siempre la ansiedad de mi corazón callando casi de inmediato mis miedos nocturnos. Gracias Dios, por ser la maravillosa luz eterna, hoy es tu momento y muchos que vendrán, pues tu mi fuente de inspiración me recuerda que aunque todos se hayan marchado tu aguardas allí a un ladito de mi cama, y para ti soy un gran regalo, como todos en este mund...

  Amigos y Enemigos   Dicen que el corazón y la mente les gusta discutir, Pero sus embates y discusiones te enseñan a vivir, Cuando la balanza no se inclina por uno a su favor, Comienza una tormenta que causa hasta temor, Pues cuando el amor llegan despacito sin pensar, El corazón y la mente empiezan a conversar Piensan día a día quien lograra ganar, Pero inevitable… la persona escogida volvió a amar.              El corazón y la mente miran de frente al amor, Pero el sentimiento más bello encontrara su valor, Vengan de nuevo amigos míos como las olas de mar, En el amor y las fortunas uno tendrá que ganar, Y si un día sus acuerdos se vuelven a unir, Todos tendrán la dicha de amar y sentir.

  Te perdono Te perdono, por cruzarte en mi camino cuando no lo esperaba, y porque aun en la sombra tu recuerdo me acompaña, ese perdido amor resuena en mi mente, no como un sentimiento hermoso sino como un Adiós, pues ahora después de mucho tiempo me atrevo a escribir de ti, los años me llevan a la reflexión de tu presencia efímera, pero a pesar del dolor, la desolación y tu fría mirada Te perdono. Mi corazón solo encapsulo los momentos donde no era yo, sino que era eso que tu querías que fuera, donde cada respuesta mía no se adaptaba a tu vocabulario y tus acciones planificadas, solo me hacías divagar… titubear… hasta sin percatarme me volvía menos, pero ahora Te perdono, por todas esas promesas incumplidas que tontamente creía, aun en este mismo instante me cuesta escribirte, parece que mis manos no tienen la fuerza para describirte. Sé que no me leerás, y mi recuerdo no abordara tus sueños, pero sin duda Te perdono, por causarme el ahogo que sentía al verte y por nunca ...